con algún que otro remiendo,
octosilábicas rimas,
para ver si, así, te animas
a mandarme chistecitos,
que traten sobre perritos
o cualquier otro animal...
¡Aunque sea de un chacal!
Y, si prefieres hacerlos
de cornudos, hay que verlos,
¡cuernos erguidos al viento,
cual si fuera un monumento!
No hay comentarios:
Publicar un comentario